Con el fin de generar un plan de acción para una vida saludable es necesario romper con algunos mitos que existen sobre la alimentación. Aquí en el Blog HV te presentamos cuáles son los más comunes para que no entorpezcan tus propósitos:
¿Alimentos que engordan?: En muchas ocasiones se dividen los alimentos en dos grupos, los que engordan y los que no. Lo cierto es que esta clasificación carece de sentido, ya que un alimento no tiene la capacidad por sí mismo de hacer que una persona aumente de peso deliberadamente. La obesidad es una enfermedad multifactorial, por lo tanto en el momento de iniciar un plan saludable para la disminución de peso es necesario tener en cuenta todos los factores asociados: dieta, ejercicio, sueño, patología, genética, etc. Por lo general el pan, el arroz, el huevo, la carne de cerdo, las frituras, los dulces, las frutas, las sopas y los jugos son los principales alimentos que se limitan en el momento de perder peso, sin contar con un soporte para eliminarlos y sin acompañamiento de un profesional en nutrición.
Dietas milagrosas: Las dietas milagro son uno de los modos más empleados por las personas para adelgazar, ya que ofrecen una solución fácil y rápida para disminuir el peso. Lo preocupante del tema es que se pueden encontrar este tipo de dietas en revistas, blogs, páginas de internet o recomendadas por influenciadores en redes sociales, afectando la salud y causando daños permanentes en la composición corporal y el crecimiento principalmente de jóvenes adolescentes, provocando deshidratación, pérdida de las reservas de glucógeno, proteínas corporales, y en un menor porcentaje de grasa, que es lo que realmente se busca perder cuando se desea disminuir de peso de manera saludable.
Productos que ayudan a perder peso: El mercado ofrece cientos de productos que prometen a sus consumidores perder peso rápidamente y sin esfuerzo. Sin embargo, estos productos no suelen cumplir esta promesa ya que no funcionan por sí solos, y en algunos casos tampoco hacen que la pérdida sea más rápida, ni siquiera cuando se acompañan de una dieta equilibrada y de ejercicio. Algunos de estos productos son:
Diuréticos: los cuales producen pérdida de peso a expensas de sufrir efectos secundarios como deshidratación, cansancio, insomnio y taquicardias.
Quemadores de grasas: No existe soporte científico que avale que estos productos generen una pérdida de tejido graso localizado, y sus efectos dependen del tipo de sustancia y de la cantidad que se consume.
Medicamentos saciantes: Estos generan pérdida del apetito, logrando disminución de la ingesta calórica y por ende pérdida de peso, algunos son principalmente fibras que generan este efecto y otros son fármacos anorexgénicos como la sibutramina que el INVIMA suspendió su comercialización tras comprobarse sus efectos negativos en el sistema cardiovascular, los cuales podrían ser mortales; lamentablemente se siguen comercializando algunos de sus derivados con otros nombres.
En resumen la única forma de evitar y tratar el exceso de peso es modificando los hábitos que lo motivaron, como lo son entre otros una dieta no adecuada, el sedentarismo, el estrés, falta de sueño y de orden en los horarios de consumo de los alimentos. Para mayor información y lograr metas alcanzables y un seguimiento adecuado a cada persona, es muy importante tener el acompañamiento y consulta de un profesional en nutrición.